Las políticas deben parir SOLUCIONES, no gestar más desigualdades.
Legalizar esta práctica aberrante, otra forma más de violencia contra la mujer, apelando al sentimiento humano cuando hay detrás dolor emocional, bien sea por sufrir algún tipo de enfermedad que imposibilite gestar, fecundar, por deseo, creerse con el derecho a ser padres, madres, no es justificación alguna para vulnerar, someter a otra mujer valorada por su útero a una utilización puramente mercantil. Los deseos no son derechos y menos si atentan contra la integridad de las personas
Un recién nacido forzado a ser despojado de la madre, siendo el producto de una operación económica de compra-venta. Es ilegal la venta y tráfico de seres humanos, como debe ser ilegal la vulneración y violencia hacia la mujer por el hecho de serlo.
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