Qué es la Abolición

Post que explica argumentos sobre la abolición

   

ARGUMENTOS ABOLICIONISTAS. 

Post nº1 . 
Primera entrega de informaciones y argumentaciones, propias o ajenas, para reflexionar sobre el tema y afianzar y defender nuestra opinión en otro foros, rebatir y sentar las bases del posicionamiento del Front Abolicionista, en el que reclamamos y exigimos un mundo sin explotación sexual y reproductiva de las mujeres.

"Creer en la abolición de la industria del sexo, en tanto mujeres ya salidas de la prostitución, es saber que no tenemos ni el tiempo ni el espacio para sostener un debate intelectual sobre la prostitución. 

Los debates se fundan sobre eventos y sujetos estables, donde todos los involucrados están relativamente seguros.
Se pueden debatir ideas filosóficas abstractas ,de realidades históricas que son solucionables o en todo caso, que no amenazan nuestra supervivencia diaria.
Se puede simplemente argumentar para hacer tiempo o para ganar puntos.Pero el debate es inadecuado frente a un genocidio, frente a la tortura generalizada y la deshumanización de las prostitutas.

Pretender que simplemente podemos debatir la existencia de la prostitución es una táctica de la presión de la industria del sexo. El lobby de la industria del sexo puede discutir porque para ellos, es un juego; para ellos, la prostitución no tiene impacto humano, porque las personas prostituidas están deshumanizados. El debate sobre la prostitución lo promueve y favorece el lobby de la industria del sexo, ya que pueden mentir, puede representar pinturas románticas, pueden imitar el discurso de la izquierda. Lo hacen con el espíritu del proxeneta, el espíritu de cliente-Prostituidor - una perspectiva fría y calculada, que pone el dinero por encima de los derechos humanos básicos, que coloca el orgasmo masculino por encima, en cuanto a valor, de la tortura generalizada de las mujeres prostituidas.

La perspectiva del lobby de la prostitución está calculada y se basa en la perspectiva del proxeneta y del cliente – sepa esto y usted podrá comenzar a entender por qué el de la prostitución no es un debate. Hay que ver esta simple verdad, y entonces podremos desmontar los argumentos que el lobby prostituyente trae constantemente. El lobby de la industria del sexo intentará convencerte de que si la prostitución se practica a puerta cerrada, es y será segura. Pero cuando el lobby de la industria del sexo habla de seguridad, este concepto se vuelve muy ambiguo Su prioridad es garantizar la seguridad y confidencialidad del cliente-prostituyente, no la seguridad de las mujeres que enfrentan violencia de los prostituidores. Tratan de dar la impresión de seguridad para las mujeres prostitutas - mientras que las violacines, las palizas, torturas e incluso asesinatos siguen siendo la norma, siempre y cuando se haga a puerta cerrada. Se trata de darle a la prostitución una apariencia de tener la suficientemente seguridad para que siga reportando enormes ganancias. No se trata de conceder las prostitutas derechos humanos, o ni siquiera de reconocerles simplemente su humanidad.

El lobby de la industria del sexo tratará de diferenciar la buena prostituta de la mala. Para ello inventarán puta feliz, la prostituta que sufre poco o nada la violencia masculina, esa violencia que controlan los puteros, hombres respetuosos. La puta feliz es la puta de la clase media, generalmente de color blanco, que se inició en la prostitución en sus veinte o treinta años, que factura tarifas elevadas, que puede dejar a la industria cuando ella quiera y que elige sus actos sexuales libremente.
Su actividad es calificada como empoderamiento, feminista, izquierdista y liberadora. El resto de personas prostituidas, que es por lo bajo el 98% de las mujeres en prostitución, se convierten en prostitutas malas que no cuentan en la perspectiva del lobby de la industria del sexo. Este porcentaje comprende a las autóctonas que son prostituidas, , prostitutas negras, las prostitutas de Europa del Este, asiáticas y cualquiera otras prostitutas de otros lugares de procedencia. También incluye a las menores que entran en prostitución, las que entran a la prostitución después de un asalto sexual, físico o mental, a las que ingresan a causa de la pobreza o de las adicciones. También incluye a las que entran en la prostitución debido a mentiras y la coacción de un hombre que dijo amarlas , así como aquellas a las que miembros de sus propias familias pusieron a prostituirse.

Esto incluye todas las personas que no pueden escapar de la violencia masculina, que constituye la norma en todas las formas de prostitución. Esta “mala puta” constituye el ensamblaje de la industria de la prostitución. La industria del sexo se fundamenta en la fabricación de malas prostituidas. Es la puta feliz, que es una ilusión y se utiliza como una cortina de humo por el lobby de la industria del sexo. Casi todas las prostitutas sobreviven fingiendo felicidad, y fingiendo resiliencia , y fingiendo tener cierto poder. Esta actitud es esencial para mantener un cierto sentido de la humanidad en un mundo que las percibe como una mercancía deshumanizada. Si mantiene una hebra de la humanidad, aunque tenue, es porque mantiene un poco de intimidad lejos de la industria del sexo. Esto se convierte en la vida de la puta feliz, si te niegas a ver al ser humano en la prostituta. Es una negativa a ver lo que hay detrás de la mirada encantada de feliz puta, es una negativa a escuchar que la puta feliz no hace ninguna mención de la violencia masculina; y es que no se autoriza a la puta feliz a existir, aparte de los breves momentos en los que todo parece estar bien.

La puta feliz es creada y manipulada por el lobby de la industria del sexo. Impulsarán a la puta feliz y la pondrán a la vanguardia para silenciar las voces de las mujeres que han salido del medio y describen las condiciones que han vivido dentro. Enviarán o apoyarán a las putas felices a manifestarse o batallar en Twitter o Facebook. Pero sepan que muchas putas supuestamente felices en estos medios son especuladoras de la industria del sexo, se aprovechan de esa industria y muchas nunca han sido prostitutas o han ejercido la prostitución como un hobby eventual. Son las que se aprovechan de la prostitución y que hacen una lucha contra las mujeres que han conseguido salir de la prostitución y exigen cambios reales en la sociedad.

La especulación de la industria del sexo contra las mujeres que han podido salir del medio prostituyente alcanza una violencia mental extrema. Una de sus tácticas es decir que las ex prostitutas se están engañando a sí mismas, decir que mentimos sobre la violencia, o que nunca hemos sido prostitutas verdaderas. Otra táctica es decir que si hubo violencia, cómo podemos estar todavía con vida, o se nos reclama que expliquemos y demostremos sobre esos hechos violentos, dónde, cuándo y cómo el supuesto abuso o la pretendida violencia ocurrió. Otra táctica consiste en decir que "trabajan" en el área donde estábamos, y que ninguna prostituta nos ha visto a nosotras allí, llamándonos fabuladoras.
Otra táctica consiste en amenazar a las mujeres que han abandonado el medio prostituyente diciendo que tienen nuestras direcciones, que pueden ir a por las personas que amamos, herirlas o hacernos daño a nosotras. Otra táctica es difundir la mentira de que nuestros cónyuges han recurrido al trabajo sexual y por lo tanto no podemos confiar en nadie fuera del medio prostituyente y que mejor haríamos si siguiéramos en la línea.

La violencia mental del lobby de la industria del sexo en contra de las mujeres que han salido de la prostitución es interminable y multifacética, y todavía reposa en el prejuicio de que debemos ser destruidas o muertas para poder expresarnos.

¿Cómo debatir con aquellos que quieren verte destruida? Eso no es un debate - es una cuestión de vida o muerte para las mujeres prostituidas"

Rebecca Mott 5 de mayo de 2015.




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