CARTA A LA RECTORA DE LA UNIVERSITAT DE VALÈNCIA


El próximo 12 de diciembre se celebrará en la Facultat de Ciències Socials de la Universitat de València una jornada bajo el titulo "Reenfocando el debate: Derecho laboral, trabajo sexual y explotación".
Nos pareció irresponsable que la universidad se prestara a servir de canal legitimador de una gira promocional que normaliza una actividad basada en la inequidad sexual y de clase.
“En la universidad crece un pensamiento que después cae, como gotas de lluvia, sobre la propia sociedad” (Rosa Cobo)
Entendemos que la prostitución es la máxima expresión de la vulneración de derechos fundamentales, algo propio de esta institución masculina patriarcal que reproduce sistemáticamente la violencia hacia las mujeres e incrementa la desigualdad entre hombres y mujeres.

Por tal motivo decidimos enviar, el pasado 5 de noviembre, un e-mail a la rectora de la Universitat de València, María Vicenta Mestre Escrivà, para que considerara la cancelación de actividades que se lucran de la vulnerabilidad de las mujeres más desfavorecidas y atenta contra los derechos humanos, tal como se reconoce en el Convenio de Estambul, el informe Cedaw, el Pacto de Estado y el Pacto Valenciano contra la violencia de género.


Nuestra carta dice lo siguiente:

Estimada Rectora:

Hemos tenido conocimiento que el próximo 12 de diciembre tendrá lugar en la Facultad de Ciencias Sociales una jornada para la promoción del “trabajo sexual”. El discurso del “trabajo sexual” no es el de una minoría oprimida, es el del proxeneta opresor que busca despenalizar el proxenetismo y legitimarse. Es inadmisible que la universidad abra las puertas al lobby prostituidor para hacer propaganda de sus negocios criminales, captar universitarias para prostituirlas, universitarios para aumentar su “clientela” y ser legitimados como empresarios, “empleadores” o “clientes” de las “trabajadoras sexuales”. Promocionar la prostitución bajo el eufemismo de “trabajo sexual” es hacer apología de la violencia hacia las mujeres.

El art. 30 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos dice: "Nada en esta Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender y desarrollar actividades o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos y libertades proclamados en esta Declaración".
La prostitución suprime los derechos y libertades de las mujeres y niñas prostituidas. Emprender desde la universidad una actividad o realizar un acto tendiente o favorecedor de la supresión de los derechos y libertades de mujeres y niñas proclamados en esta declaración, supone una violación de los derechos humanos por parte de la universidad.

Ya es sabido, pues hay suficientes informaciones publicadas, que las supuestas asociaciones o sindicatos que promueven la prostitución como un trabajo y se hacen pasar por representantes de las prostituidas y se autodenominan falsamente “pro-derechos”, han sido fundadas, promovidas o financiadas por el lobby proxeneta. El lobby proxeneta está formado por proxenetas, puteros, fondos de inversión que quieren obtener beneficios legales de la prostitución y todas aquellas personas y negocios que se benefician directa o indirectamente de la prostitución. Básicamente hombres.

Fondos de inversión como la Open Society Fondation denunciada por la Coalición Contra la Trata de Mujeres -CATW, que financian medios de comunicación y grupos de presión internacionales como como La red Umbrella Found, Mama Cash, la Union Internacional de Trabajadoras Sexuales, la Red de Proyectos para el Trabajo Sexual y sus muchas ramificaciones en muchos países, incluida España, para infiltrarse en instituciones y conseguir legislación para favorecer y descriminalizar los negocios de los proxenetas. Aunque presentan mujeres ante la sociedad para evitar el descrédito, pues somos todas nosotras, las perjudicadas por la existencia de la prostitución.

Asistimos con desesperación a la infiltración del lobby proxeneta en las universidades mediante académicas, departamentos de estudios de género y proyectos universitarios que concluyan que la prostitución es un trabajo. La periodista de investigación Julie Bindel ha publicado investigaciones que podemos ver traducidas en el blog de Traductoras para la Abolición de la Prostitución con sus fuentes originales, como la que habla del proxeneta John Davis quien se hace pasar por “trabajadora sexual” en las redes y promueve un equipo académico en la universidad para luchar contra las abolicionistas, desprestigiar a las supervivientes de la prostitución que se atreven a contar la violencia, defender a los puteros, promover la despenalización del proxenetismo y luchar contra las medidas sociales para ayudar a las mujeres a abandonar la prostitución.

Si una de las funciones de la universidad es investigar…¿Por qué no investiga este fraude en lugar de permitir al lobby proxeneta inspirar las investigaciones?

Los puteros, sean carpinteros, jueces, policías, periodistas, directores de medios de comunicación, profesores universitarios o rectores, prefieren dar voz a aquellas mujeres que les llamen clientes y no los violadores que son. Y utilizan el poder que las prostituidas no tienen para difundir la propaganda que preserva sus privilegios mientras se llenan la boca con la libertad de expresión que ellos deciden a quien se la conceden.

Al mismo tiempo, es injusto que se planteen debates con ambas posiciones como si quienes defienden el discurso favorable a este negocio esclavista y criminal tuvieran la misma legitimidad que las feministas que arriesgamos nuestra seguridad sin ningún beneficio personal. Sabemos que las leyes abolicionistas surgidas del feminismo desmantelan el segundo negocio criminal más lucrativo del mundo, como ya se ha demostrado en los países donde se han implementado. Es lógico que para las mafias criminales de la prostitución las abolicionistas seamos el principal objetivo a abatir, pues nuestras reivindicaciones son la mayor amenaza a su negocio. Son muchas las compañeras abolicionistas que tienen miedo a dar la cara y hablar en público por el abolicionismo y se autocensuran, o escriben y difunden con seudónimos por miedo al acoso o a las represalias que recibimos quienes sí damos la cara y el nombre.
Es muy difícil hablar con libertad cuando al lado o en frente tienes escuchando, debatiendo y hostigando a quienes sabes que representan los intereses de gente tan peligrosa, con el cinismo insoportable de hacerse pasar por representantes de las prostituidas.
Mientras se ofrecen espacios universitarios para la libertad de expresión del discurso proxeneta opresor, vemos que las mujeres que sufren la prostitución siguen censuradas, encerradas en los burdeles y torturadas, violadas sin pausa, amenazadas y sin posibilidad de hacer público su sufrimiento y viendo su voz usurpada por aquellas que defienden las medidas que benefician a los opresores que ganan fortunas con ellas.

Hay países donde la pena de muerte está legalizada, hay otros que tienen legalizada la prostitución y han descriminalizado a los proxenetas. Ambas son violaciones de derechos humanos legalizadas. No vemos en las universidades de nuestro país que se organicen charlas para debatir si instauramos la pena de muerte o no. Cuando se trata de los derechos humanos que afectan a los hombres somos mucho más cuidadosos pero cuando afectan a las mujeres debatimos sin filtro si se legaliza un negocio que viola masivamente los derechos humanos de mujeres y niñas.

No es aceptable apelar a la libertad de expresión para defender el discurso que beneficia a criminales mientras sus víctimas siguen censuradas. La universidad no puede promocionar discursos contra los derechos humanos apelando a la libertad de expresión pues este subterfugio viola el artículo 30 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. El Front Abolicionista del País Valenciá está formado por más de 40 asociaciones feministas que esperamos de la universidad que sea activa en remover los obstáculos que impiden la igualdad entre hombres y mujeres y no en afianzarlos.

Un cordial saludo.
Front Abolicionista del País Valenciá

P. D. Las universitarias también se están movilizando contra la amenaza que supone para ellas este discurso amparado por la universidad:


Listado de Asociaciones integrantes del Front:

Carta original:




Muestra de algunas reacciones ante esta gira por las universidades:









Respuestas de las estudiantes:













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