La ley francesa del 13 de abril de 2016 para reforzar la lucha contra el sistema prostitucional y apoyar a las personas prostituidas.
Principios, metas, medidas y proceso
Recogemos en esta entrada el folleto realizado por CAP International sobre la ley abolicionista francesa.
INTRODUCCIÓN
La ley del 13 de abril de 2016, que tiene como
objetivo fortalecer la lucha contra el sistema
prostitucional y acompañar y apoyar a las personas prostituidas o en situación de prostitución, está basada en tres principios fundamentales: La prostitución constituye una violencia contra las mujeres, es un obstáculo para alcanzar la igualdad, y atenta contra la dignidad humana.
Por primera vez en la historia de Francia, la ley
prohíbe la realización de cualquier acto sexual
que sea impuesto por dinero, descriminaliza a
las personas prostituidas, involucra al conjunto
de la sociedad en su cumplimiento e incluye la
puesta en marcha de políticas nacionales de
salida de la prostitución.
Esta ley complementa a una legislación firme,
ya existente en materia de lucha contra el proxenetismo y permite la consecución de dos grandes objetivos:
desalentar y evitar la entrada de personas en
la prostitución, que afecta principalmente a la
población más vulnerable y cada vez a más jóvenes de la misma, (la mayoría
mujeres) y proteger de manera efectiva a través de medidas concretas a las víctimas de prostitución que hasta entonces estaban abandonadas a su suerte.
Esta victoria abolicionista se inscribe entre los
avances más importantes de los derechos de
las mujeres, que han cambiado el rumbo de la
historia.
Es una lucha contra la violencia (social y sexual),
por los derechos humanos, por la emancipación
de las mujeres y por la igualdad.
Permite que el cuerpo humano y la sexualidad
de las personas queden fuera del alcance de los
mercados.
Con esta ley en Francia se dispone de una legislación integral que permite dar
alcance a los objetivos a través de:
1: Acabar con la represión de las víctimas de
prostitución, a través de la abolición del delito
de «racolage» (el cual hace referencia al ejercicio de la prostitución en sí, a la solicitud de “clientes” por parte de las prostitutas (o captación de clientes)) [1].
Esta medida que resulta indispensable para
ofrecer un mejor acceso de las víctimas a la
justicia y a los programas de salida de la prostitución, también tiene un importante valor
simbólico. El delito de racolage (puede sancionar dos cosas: "racolage actif" que es captar "clientes" y ofrecer abiertamente relaciones sexuales a cambio de una prestación económica y/o "ragolage passif" que es buscar a una persona para comprar relaciones sexuales) existía desde 1939 y hacía recaer la responsabilidad de la
explotación sobre sus propias víctimas. Entre
los años de 1946 y 1958 incluso imponía sanciones sanciones más severas a las mujeres prostituidas que al proxenetismo y a los prostituideores. La supresión del delito de racolage y la adopción
de numerosas medidas favorables a las víctimas,
permitieron luchar contra las diferentes formas
de discriminación y restablecer su confianza en
el gobierno y en los poderes públicos.
2: Promoviendo el acceso a medidas de salida de
la prostitución en todo el territorio nacional.
La Ley instaura a nivel departamental políticas integrales y efectivas de apoyo a las personas prostituidas, en sectores en los que muy a menudo habían sido discriminadas como la
vivienda, el trabajo o la sanidad. Esta nueva política pública que favorece el trabajo coordinado
entre las ONGs y los servicios estatales, cuenta
con presupuesto propio que está destinado a la
prevención de la prostitución y al apoyo de las
víctimas. Cualquier persona prostituida que no
tiene acceso a las ayudas sociales convencionales, tiene derecho a recibir apoyo económico
para favorecer su proceso de reintegración
social y profesional.
3: Asegurando la protección y el apoyo a todas las
víctimas, incluyendo las personas extranjeras.
La ley prevé la condonación de las deudas fiscales de todas aquellas personas que deseen
salir de la prostitución. También permite la concesión de un permiso de residencia temporal a
las víctimas extranjeras, incluso aquellas que
no están en disposición de declarar, con la condición de que éstas se comprometan a iniciar
un proceso de salida de la prostitución. De esta
forma también se garantiza que las redes de
explotación no puedan llegar a beneficiarse
de este permiso. La ley refuerza asimismo el
derecho de indemnización de las víctimas del
proxenetismo, al exigir que el Estado se porte
garante en caso de que el proxeneta sea declarado insolvente.
4: Reduciendo la prostitución a través de la prohibición de compra de cualquier acto sexual.
La ley generaliza la prohibición del consumo
de prostitución ajena. La criminalización de la
compra de cualquier acto sexual, permite afirmar
solemnemente que nadie tiene el derecho a explotar la precariedad o la vulnerabilidad de otra
persona, imponiéndole un acto sexual a cambio
de dinero. Al atacar frontalmente la demanda, la ley desanima a las redes proxenetas a invertir
en un territorio donde la legislación resulta más
desfavorable para sus actividades delictivas y
ganancias criminales. Por último, la ley protege
a cualquier persona que decide seguir en la prostitución, al poner a su disposición por primera
vez un mecanismo de disuasión legal que les
permite que sus «condiciones» sean respetadas
frente a compradores potencialmente abusivos.
5: Estableciendo una política pública nacional de
prevención, capacitación y educación.
Implementación, en todo el territorio nacional, de medidas de acceso a los itinerarios de salida de la prostitución . La ley establece programas de educación e información destinados a colegios y escuelas,
sobre la realidad de la prostitución y los peligros
que conlleva la mercantilización del cuerpo
humano. Integra la promoción de relaciones de
igualdad entre mujeres y hombres, dentro de los
programas escolares de educación sexual. Asimismo, introduce de manera oficial en los programas de formación y capacitación de las y los
trabajadores sociales, un modulo de prevención
de la prostitución y la identificación de situaciones de prostitución, proxenetismo y trata de
personas.
Muy a menudo presentada como la ley que criminaliza a los compradores de actos sexuales,
la nueva ley francesa en realidad es una ley integral que refunda y reagrupa todo un conjunto
de políticas públicas en materia de prostitución.
La Ley modifica disposiciones de nueve códigos
nacionales.
Notas:CONTENIDO
Situación del derecho francés después de la adopción de la ley
- La lucha contra el proxenetismo
- Prohibición de la compra de actos sexuales
- Protección, apoyo y políticas de salida de la prostitución
El espíritu de la ley.
- Marco filosófico. Un descubrimiento de los principios abolicionistas.
- Adopción de la Resolución parlamentaria de 6 de diciembre del 2011: “reafirmando la posición abolicionista de Francia en materia de prostitución”.
- Marco teórico: abolicionismo, una cuestión de igualdad entre mujeres y hombres
- Extractos de las intervenciones parlamentarias
El proceso de adopción de la ley
- Marco teórico: el largo camino del abolicionismo
- Cronología de la movilización de la sociedad civil y del proceso legislativo desde 2009
- Presentación del equilibrio político que permitió la adopción de la ley
- Marco: Abolición 2012: movilización innovadora
- Movilización de grupos estratégicos: médicos/as, magistrados/as, sindicatos y grupos de jóvenes. Las supervivientes de la prostitución, además, instan al Primer Ministro y a los/as parlamentarios/as a la abolición de la prostitución
- Evolución de textos nacionales e internacionales
- Argumentos y contra-argumentos.
- Un falso mito: “El fracaso de la ley sueca”:
Anexo: presentación de los 23 artículos
que conforman de la ley de 13 de abril de 2016 .
[1] El racolage surgió en Francia como falta administrativa en 1939. El delito puede sancionar dos cosas: ofrecer abiertamente relaciones sexuales a cambio de una prestación económica (racolage actif) y/o buscar a una persona para invitarla a tener relaciones sexuales (ragolage passif). Desde 1939 y hasta 2003, las personas que ofrecían servicios sexuales siempre enfrentaron sanciones más altas que quienes buscaban servicios sexuales (de hecho, durante algunos periodos, los "clientes de servicios sexuales" no fueron sanciones en absoluto). En 2003, el entonces presidente Nicolás Sarcozy elevó la falta a rango de delito y fusionó el racolage actif y pasif de forma que tanto la venta como clientes enfrentaran la misma sanción. Sin embargo, en 2012, el Senado francés propuso la derogación del racolage publique, por ser ineficaz e innecesario para luchar contra el proxenetismo y fomentar el estigma de los trabajadores sexuales. La Asamblea Nacional estuvo de acuerdo y, así, quedó derogado el racolage en marzo de 2013.(más info en este artículo del 2015, anterior a la ley abolicionista francesa del 2016: Criminalizar al cliente: el régimen legal de la prostitución en Francia
Nota sobre el pdf: Se trata de una traducción desde el francés y por tanto recoge algunos términos que no coinciden con su correspondencia en el castellano. Por ejemplo;
* Accompagnement = acompañamiento. Soutien = apoyo
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